Hereu recibe la primera bronca como alcalde
• Un grupo de jóvenes abuchea al edil e intenta boicotear el estreno de la UB
R. M. S
BARCELONA
Jordi Hereu vivió ayer su primera bronca pública desde que tomó el relevo de Joan Clos. Un grupo de estudiantes irrumpió durante la inauguración oficial de las nuevas facultades de la UB y, con gritos e insultos, le pidió explicaciones por el encarcelamiento de los tres jóvenes acusados de los altercados en una casa okupada en Sant Pere més Baix, el 4 de febrero. En los enfrentamientos un guardia urbano resultó herido y continúa gravísimo.
A pesar de que el rector de la UB, Màrius Rubiralta, les cedió el atril (desde el que el periodista Josep Maria Huertas y el filósofo Xavier Rubert de Ventós leyeron las lecciones inaugurales) para que plantearan sus reivindicaciones, la veintena de jóvenes continuaron toda la celebración con su actitud de boicot. Según ellos, no existen pruebas contra los tres acusados, uno de los cuales es estudiante de Geografia i Història.
Hacia el final del acto, cuando Hereu tomó la palabra, pidió "disculpas" por los incidentes a un auditorio que aguantó estoicamente las interrupciones, y dijo aceptar que debates e incidencias de la calle "entren en los pasillos de las universidades". Y fue generoso: "Está bien si se hacen con corrección como se han hecho", a lo que también fue abucheado. "A los alcaldes se les pide muchas cosas, pero no me toca a mí evaluar" este tema, "porque soy alcalde, no juez", afirmó.
DIÁLOGO
Ya fuera del aula magna, se pudo ver al alcalde acercándose a hablar con una de las jóvenes que había llevado la voz canta
nte.PROTESTA. Un grupo de estudiantes, ayer, recibe con gritos al alcalde Jordi Hereu (bajo una pancarta lanzada) a la entrada del aula magna del flamante edificio de la Universitat de Barcelona.
Jóvenes con carteles de protesta en un pasillo de la sala, donde permanecieron durante las cerca de tres horas que duró el acto inaugural.
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