Publicado en la ed. impresa: Información general Jueves 26 de octubre de 2006
Nueve meses en prisión
Un argentino denuncia ser discriminado en España
Está preso, pero se declara inocente
(Télam).- Juan Pintos, el joven argentino de 23 años que se encuentra en prisión desde el 4 de febrero pasado en Barcelona por su presunta implicación en la agresión a un guardia urbano, denunció que recibe un "trato injusto" por parte de la justicia española, que le niega la libertad provisional por haber nacido en la Argentina.
"Siempre pensé que no iba a hacer falta recurrir al gobierno argentino porque, además de ser inocente, creía que en España, con la doble nacionalidad, me iban a tratar igual que a cualquier otro español", dijo Juan en una entrevista con Télam en la prisión de menores de 25 años conocida como la Trinidad.
Sin embargo, dice que siente que está "en una especie de limbo legal, porque aquí la Justicia afirma que soy argentino nacionalizado español -cuando en realidad legalmente soy español nacido en el exterior-, y utiliza ese argumento para negarme la libertad al decir que no estoy arraigado y me puedo fugar", agregó Juan, que lleva 9 meses en prisión.
Por otro lado, "como estoy en España y tengo nacionalidad española, las autoridades argentinas que están informadas del caso no respondieron con ningún tipo de ayuda concreta", dijo el joven con tristeza.
Fuentes de la cancillería argentina explicaron que "el hecho conmueve y por eso que estuvimos alerta y nos acercamos a la familia". Un funcionario del Palacio San Martín aseguró: "En todo el proceso no hay nada que nos haga suponer que haya denegación de justicia, con lo cual no podemos intervenir directamente. A él se lo está juzgando como ciudadano español. De todos modos, el consulado le está prestando asistencia y está en contacto permanente con su abogada y su familia".
Juan está acusado, junto con otros ocho jóvenes, de participar en la agresión a un guardia urbano que quedó en coma durante los disturbios ocurridos el pasado 4 de febrero en la puerta de una casa "ocupada", propiedad del ayuntamiento de Barcelona, donde se realizaba una fiesta ilegal. Seis de los presuntos implicados, todos ellos europeos, quedaron en libertad hasta que se celebre el juicio, mientras que Juan y los chilenos Rodrigo Lanza y Alex Cisterna, señalado el primero como "instigador" de la agresión y los otros dos como autores materiales del hecho, llevan casi nueve meses en prisión.
La Audiencia Provincial número 8 de Barcelona denegó la semana pasada todos los recursos presentados por los abogados de la defensa contra el cierre de procesamiento que dictó la juez Carmen García Martínez en junio, y confirmó la prisión provisional de los tres jóvenes sudamericanos.
"Está clarísimo que somos los chivos expiatorios. Fueron contra nosotros, tres chicos menores de 25 años y sudamericanos, como lo hubieran hecho contra un árabe", dijo Juan.
Si bien mantiene las esperanzas de tener un juicio "justo", aseguró que si lo condenan "será una noticia muy dura", pero cree que será fuerte para superarlo.
10.26.2006
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario